La radio nació por la imperiosa necesidad que tiene el ser humano de comunicarse.
Más específicamente, comunicarse con los barcos en altamar. No nació como la radiodifusión propiamente dicha, capaz de mandarle un mensaje a las masas.
Como en ese momento no había forma de que la voz viajara sin cables, decidieron inventar la forma. El secreto estaba en el espacio.
Buscando el secreto para transmitir la voz humana, fueron claves los descubrimientos de Maxwel en 1860 respecto de la energía electromagnética de la luz y la predicción de la existencia de las ondas de radio en el espacio.
Empezaron a investigar, el modo de propagarse y posteriormente llego la demostración de la existencia real de esas ondas. Fue realizada por Hertz en 1988, quien también produjo en el laboratorio un aparato capaz de generarlas. Son el principio y punto de partida de la radiodifusión.
¿Cómo sigue esta historia?
En 1987 Guillermo Marconi, un joven italiano intrépido, fascinado por la electricidad, luego de realizar varios experimentos, obtuvo la primera patente para enviar señales a través del espacio.
Ese mismo año, Marconi logro poner dos barcos en comunicación con el puerto.
En 1898 unió con señales de radio las costas francesas con la inglesa.
Pero esto no paró de crecer, en 1901 se enviaron señales desde Inglaterra hasta Canadá.
Aunque fue David Sarnoff el punto de quiebre entre lo que era esta forma de comunicarse, hasta la actualidad.
En 1912 Sarnoff estuvo comunicado con el Titánic, transmitiendo lo que estaba sucediendo.
Y unos años después, en 1916 escribió un memo a la empresa en la que trabajaba en ese momento, General Marconi.
En él, decía que la radio era un aparato que podía estar en todos los hogares, convirtiéndose en un medio de comunicación colectiva.
Muchos fueron los años, los inventos, las creaciones, que resultaron en la radio tal como la conocemos hoy.
En Argentina, fue un día como hoy, pero hace 101 años atrás, en 1920, que ocurrió un hecho histórico en el mundo.
Cuatro radioaficionados Enrique Susini, César Guerrico, Luis Romero Carranza y Miguel Mujica pasaron a la historia como los Locos de la Azotea, ya que se subieron a la terraza del Teatro Coliseo y lograron transmitir la ópera Parsifal, de Richard Wagner. Esta fue la primera emisión de un programa de radio en el país.
Este hecho fue el que sentó las bases para que a partir de allí todos los 27 de agosto celebremos "El Día de la Radio en Argentina".
La radio es servicio, es magia y es amor.
🎙¡Feliz día a todos aquellos que comparten con nosotros la pasión de hacer radio!