Microsoft Flight Simulator hace escala en Xbox Series X|S y levantamos vuelo

El arte de volar con una heladerita

Tiro del acelerador y la minúscula nave amarilla se sacude sobre la pista de tierra. Es tan liviana que se me va a la izquierda. Tiré hacia atrás y levanté la nariz. Respiré aliviado, pero siempre que subo a un avión tengo ganas de hacer pis. Le pido a mi copiloto que bajemos en algún lugar. Entre risas me da una botella vacía de agua, pretendiendo que la use como baño con esta turbulencia. Pero esto ya lo viví. No es un déjà vu ni un error en la Matrix, es Flight Simulator pero ahora, en Xbox Series X|S.

Ya aprendimos a volar, o al menos eso creímos. Después de un intenso paseo por varias lecciones, entendimos cómo despegar, aterrizar y tocar un par de perillas del tablero de un avión liviano. Pero como ocurre en la vida real, si no seguimos metiendo horas de vuelo, nuestra pericia en los controles va desapareciendo. A casi un año de subirnos a un avión, volvemos a intentarlo, pero esta vez con la heladerita de Microsoft. Llegó al fin el gran desafío para Xbox Series X|S. ¿Se bancará semejante despliegue visual en la consola emblema de Microsoft? Veamos.

Si perdieron el vuelo y quieren leer nuestra review original de Microsoft Flight Simulator, pueden hacerlo acá: TIKI.

Microsoft Flight Simulator: el único aeropuerto en donde no se quedan varados

Como ya dije varias veces, no hay nada más lindo que volar (y lo dice alguien que le tiene pánico a los aviones). Pero entre la pandemia, las fobias, y los costos de los pasajes, volar es un lujo y un riesgo. Pero gracias a Microsoft y Asobo, todo es posible.

Como todos sabemos, MFS es la experiencia más cercana a volar un avión verdadero. Le da pelea con los ojos cerrados a cualquier simulador para pilotos, porque conectado a internet puede tomar horario y clima de cualquier locación en el mundo en tiempo real. Todo esto desde la comodidad de nuestras casas si hay una PC con un hardware digno.

Si tenemos la suerte de tener una computadora bien preparada y con una placa de video de última generación el resultado es sorprendente, y si tenemos un monitor 4k es un despelote. Pero el placer es inigualable para quienes, además, tienen un mando para aviones y un Oculus o Vr compatible. Eso es prácticamente estar dentro de un avión, y el sueño húmedo de cualquier piloto experimentado.

Pero la realidad económica a veces no acompaña, y tener todos estos artilugios cuesta una fortuna. Es ahi donde entra la magia de Microsoft, que intenta dar una nueva puntada en la milenaria guerra entre PC y consolas. Xbox series X|S tiene suficiente poder para correr esta maravilla en su máximo esplendor, y cuesta lo mismo que una placa de video. Con esto no decimos que sea algo barato, pero es más accesible si no tenemos absolutamente nada para armar una maquinola gamer.

Sacáme un Microsoft Flight Simulator con hielo

Imaginen todo ese despliegue gráfico, escupido en 4k a 30 fps estables y con soporte HDR directo a nuestra TV. Todo esto ocurre con total perfección y fluidez desde la famosa heladerita de MS, e incluso mejorando por momentos los tiempos de carga de PC. Todo, absolutamente todo el contenido está dentro de esta versión para consolas, que nos permite tener una ventana al mundo en el living de nuestras casas.

Volvimos a pasar horas mirando nubes y atardeceres fabulosos en recónditos lugares del mundo, pero esta vez en una gigantesca pantalla de 50 pulgadas. La sensación de placer es indescriptible. Para certificarlo, sobrevolamos las pirámides de Egipto y la ciudad de New York mientras tomábamos un café con palmeritas y la lluvia golpeaba la ventana.

Quizás puede resultar molesto moverse en el menú principal usando el mando de la consola, pero acostumbrarse solo lleva 2 minutos. La versión de la consola respeta tanto la de PC que incluso en algún momento se ve el puntero del mouse por 2 segundos.

¿Es perfecto? No, pero está cerca. Todavía necesita pulirse un poquito y optimizar, pero la actualización va a ser constante y también el nuevo contenido al igual que en la versión de PC. Esas son excelentes noticias para quienes tienen o sueñan con tener la consola insignia de MS.

Hay un detalle a tener en cuenta y para grabarse en el cerebro a fuego. MFS puede jugarse offline, pero para tener la mejor experiencia, necesita conectarse a internet. Si no lo hacemos los edificios se generan de forma automática y no respetan la forma o la textura como las conocemos. Las calles desaparecen y el tránsito circula por la vegetación como si fuera una película post apocalíptica. Pero al conectar, la magia del mapeo satelital pone todo mágicamente en su lugar. 

Esto no es para mí… pero me gustaría probarlo

Microsoft Flight Simulator sigue teniendo sus tres sabores. Su versión estándar, una versión Deluxe y por último una Premium Deluxe. Cada una de ellas incluye más aeropuertos y más aviones para disfrutar. Regularmente agregan contenido adicional para que compremos aparte si algo nos interesa, y la mejor noticia es que está dentro de Game Pass. Sí amigos, si no les da el cuero para comprarlo, o no están seguros de que Flight Simulator sea una maravilla, pueden probarlo mientras tengan la membresía activa y sorprenderse como nosotros. No hay excusas.

La pregunta del millón: ¿este simulador es para mí? ¿Me aburrirá? ¿Podré aprender a controlarlo? Xbox Game Pass es la respuesta. Si no les convence pueden abandonarlo sin culpa, pero no creemos que eso ocurra a menos que necesiten el valioso espacio en el almacenamiento interno. Esta locura necesita más de 100 gb en el disco, dependiendo de cuánto contenido adicional instalemos. Pero recordemos que Microsoft Flight Simulator es definitivamente el mejor simulador de vuelo hasta la fecha. Como gritaría Héctor Alterio si esto fuera “Caballos salvajes”: LA P••• QUE VALE LA PENA CADA GIGA!  [i]

DESARROLLADO POR: Asobo Studio
DISTRIBUIDO POR: Xbox Game Studios
GÉNERO: Simulador
DISPONIBLE EN: PC, Xbox Series X|S

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